¿Soy un sobreviviente de mi adolescente?

Padres que día a día sobreviven a las diabluras de sus hijos adolescentes…

¿Soy un sobreviviente de mi adolescente? Cada adolescente tiene su personalidad y temperamento, pero sin duda todos son un verdadero reto, simplemente por el hecho de estar pasando por esta etapa. Algunos incluso llegan a romper la armonía familiar. Este artículo te ayudará a reconocer los signos básicos que te pueden ayudar a responder a la interrogante. ¿Sobrevivo a mi adolescente? Debes cuestionarte si eres un sobreviviente de adolescentes. Debes ser honesto al responderte a esta simple pregunta, será el principio para intentar darle un giro a las cosas.

Te ha pasado que llega la noche, tu día ha sido sumamente pesado, un día envuelto en conflictos con tu adolescente. Estás recostado en tu cama, ni siquiera te has puesta la pijama y estas exhausto, tenso y simplemente miras hacia el techo, preguntándote: ¿Qué hice para merecer esto?, ¿Por qué se comporta de esa manera?, ¿Qué estoy haciendo mal?, ¿Qué voy a hacer? Bueno si te has preguntado esto últimamente tengo que decirte algo: eres un SOBREVIVIENTE de adolescentes.

Digamos que llegado este punto no sabes cómo sigues vivo, si es por suerte o debido a un milagro. No logras entender qué haces para que la relación con tu adolescente sea tan complicada. No sientes que seas alguien importante para él, sabes que eres su padre o su madre, pero no te sientes valioso. Parece que no necesita tus consejos y menos tu compañía, pero tu reconoces que no está listo, que es impulsivo, poco obediente, mal encarado. Le falta disciplina y compromiso, y aunque se lo dices cada vez que puedes, no escucha y se enoja más. Te reclama que sólo lo juzgas y no lo comprendes, entonces hace cosas peores y así llegaste al día de hoy, agotado y tenso como una roca. Estas mirando el techo con tu ropa desgastada, igual que tu alma, preguntándote que has hecho mal.

Efectivamente si te pasa esto estás sobreviviendo a tu adolescente, pero no significa que esto sea algo malo. El ser un sobreviviente en cualquier cosa es extraordinario, ahora imagínate sobrevivir a la adolescencia, no cualquiera lo logra. Una familia que supera la adolescencia se fortalece doblemente; digamos que esta etapa es la prueba de fuego para todos, aquí estallará el fuego cruzado y por lo general nadie sale ileso, por ello tengo la obligación de decirte una cosa en nombre de esos adolescentes que me visitan: muchas felicidades por seguir intentando acercarte a tu adolescente, a pesar de estar tenso, agotado y desesperado.

Debo decirte que a diario recibo en consulta a jóvenes arrepentidos por las discusiones que tuvieron la noche anterior con sus padres. Me dicen frases como: no sé por qué me pongo así, mi mamá tiene razón, ya sé que está loca pero debería escucharla, espero que un día me perdone por todo lo que he hecho.

Recuerda que la adolescencia des dará gran regalo: LA CONCIENCIA, y no la pueden evitar aunque quieran. Sin embargo, ellos son orgullosos y necesitan ganar las batallas. Eso les dará sentido a sus vidas y un camino por el cual se sienten seguros para avanzar. Ese cansancio que sientes al día de hoy ha valido la pena y no es en vano. Aunque parece que tu adolescente no te escucha y que se esfuerza en hacer lo contrario a lo que le dices, te aseguro que al momento que te da la espalda, sabe que hizo mal. Es decir, no le entra por una oreja y le sale por otra, su conciencia capta tus palabras, tus regaños, tus consejos, tus observaciones de padre, lo que ocurre es que todavía no tiene la fuerza mental para reconocerlo.

Estimado sobreviviente de adolescentes, qué bueno que te preguntes ¿Qué hecho mal? Eso habla de tu gran interés por cambiar las cosas, lo único que no puedes dejar de hacer al día siguiente es desistir en tu intento por cambiar las cosas. Recuerda que cada palabra que le dices, tu adolescente la escucha y la toma en cuenta.

Al final la adolescencia es parecida a enfrentar una tormenta de arena, en la cual sientes que se nubla tu vista, que te lloran los ojos y que no tienes aire para respirar. Te esfuerzas al doble y avanzas la mitad, pero no por ello dejas de caminar hasta encontrar el camino porque sabes que la tormenta es pasajera y que necesitas seguir adelante por tu propio bien.

Mi consejo para este nuevo año: Es natural que te canses, pero sigue adelante en el esfuerzo de conquistar el corazón de tu adolescente, llegado el momento lo notará y será una gran herramienta para su vida, quizá la más importante de todas. El saber que tiene unos padres incondicionales. Sé un sobreviviente.

Mtro. Uziel Morales-Amaya
Maestro en Psicoanálisis.
Maestro en Psicoterapia, niños y adolescentes.
Conferencista.
Correo: uziel_moam@hotmail.com

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