La fuerza de voluntad en los adolescentes
Detente un momento y piensa en las cualidades que te han hecho lograr tus objetivos en la vida. Ahora piensa en tu propia etapa de la adolescencia y cómo probablemente no desarrollabas estas cualidades. Existe una de ellas que se puede desarrollar y que seguramente le ayudará a tu adolescente a lograr sus objetivos y a ser exitoso en la vida, se trata de la fuerza de voluntad.
Bueno, ¿y cómo logro esto?
Cualquiera que sea la meta a lograr: la limpieza, la puntualidad, el orden, el aprovechamiento escolar, o simplemente ver menos televisión; la fuerza de voluntad es un paso crítico para que el adolescente logre lo que se propone.
La causa principal de no lograr realizar los cambios planeados es una fuerza de voluntad débil, sin embargo la fuerza de voluntad se puede desarrollar.
Reducida a su esencia, la fuerza de voluntad es la capacidad interna de resistir las tentaciones al corto plazo, para cumplir con las metas de largo plazo. El aplicar la fuerza de voluntad, nos permite lograr metas propuestas y no buscar la satisfacción inmediata. La fuerza de voluntad desarrollada es más importante que el coeficiente intelectual para el éxito escolar.
Los jóvenes que muestran una fuerza de voluntad desarrollada obtienen mejores calificaciones, son más educados, son más prudentes y reflexivos. Inclusive los jóvenes con mayor fuerza de voluntad serán adultos más saludables física y mentalmente, con menos problemas de abuso de sustancias y con mejores hábitos de ahorro y mayor seguridad financiera.
La fuerza de voluntad, particularmente en los adolescentes debe compararse con un músculo. Si se ejercita, con constancia, aumenta su capacidad; si esta inmóvil, se atrofia. Para ejercitar y desarrollar la fuerza de voluntad, es importante sólo enfocarse en una sola meta a la vez, en lugar de varias acciones al mismo tiempo. Recuerda el dicho del que mucho abarca, poco aprieta.
¿Qué debo hacer para que mi hijo adolescente desarrolle esta fortaleza?
Los recursos para estimular el ejercicio y fortalecimiento de la fuerza de voluntad en los jóvenes son:
· Predica con el ejemplo. Si nuestros hijos ven que nosotros nos controlamos y ejercemos nuestra fuerza de voluntad entonces apreciaran las consecuencias positivas que esto tiene en nuestras vidas y aprenderán que vale la pena el esfuerzo. Un ejemplo de esto sería no confrontar a un conductor en un incidente de tránsito a pesar del enojo que el incidente causó y explicar luego todas las posibles consecuencias de haber perdido el control para la integridad de todos lo ocupantes del vehículo.
· Encuentra una motivación. La fuerza de voluntad es la hija de la motivación. Por ello debemos buscar lo que les entusiasma a nuestros adolescentes y con ello lograremos fortalecer su fuerza de voluntad. Debemos valorar sus esfuerzos y reconocer no sólo el alcanzar los objetivos o logros. Un ejemplo de esto sería el premiar el simple hecho de estudiar, no sólo el obtener una calificación de excelencia.
· Confía en ellos. Es muy difícil que hagan algún esfuerzo si sienten que no confiamos en ellos. Lo importante es que no dejar de confiar en ellos a pesar que fallen en múltiples ocasiones. Aprendemos tanto de nuestros logros como de nuestros fracasos.
· Fomenta la autonomía. Los adolescentes que hacen un esfuerzo por una motivación interna son más perseverantes a la hora de alcanzar una meta.
· Enséñalos a no tomar decisiones precipitadas. Estas suelen darse por la falta de reflexión antes de tomar la decisión. Enséñalos a hacer juicios críticos basados en los efectos positivos y negativos a partir de las decisiones que tomemos. Si bien nuestras metas deben ser altas, no debemos establecer propósitos inalcanzables o imposibles. Tampoco debemos alargar la toma de decisiones; esto puede reflejar una falta de información o un evidente temor al compromiso.
· Hay que ser constantes. Debes crear el hábito, por ejemplo el hacer diariamente actividades que impliquen un esfuerzo como el deporte, la lectura o el estudio constante (y no sólo cuando se acerca el examen). El adolescente con fuerza de voluntad es aquel que convierte sus deberes en sus deseos.
· Crear un plan de acción. En el que se especifique el cuándo, cómo y dónde, para la actividad propuesta. El adolescente por sí mismo debe ser riguroso y exigente consigo mismo, pero el mismo tiempo debemos permitirle que realice las actividades que le den un balance a su vida y que le permitan vivir plena y felizmente su adolescencia.
Finalmente te recomiendo que observes cómo se encuentra la fuerza de voluntad de tu hijo y apliques estos recursos para fortalecerla y otorgarle a tu hijo adolescente la herramienta más útil en la vida: Saber que es capaz de lograr lo que se proponga: “Porque tiene una poderosa fuerza de voluntad”.
Dr. Juan Carlos Ochoa Tabares
Oftalmólogo, Especialista en Córnea, Cirugía Refractiva y Enfermedades Oculares Externas
Presidente del Consejo Mexicano de Córnea y Cirugía Refractiva AC.
Manuel M. Dieguez 118, Colonia Ladrón de Guevara, CP 44600, Guadalajara, Jalisco.
Tel: 01 (33) 3630 1372
Correo: drjc8a@gmail.com
Sus artículos estan buenisimos, gracias por compartirlo, esperando les sirvan a muchas personas, a Dios gracias no he padecido conis hijos de 25 y 17 años
Muchas gracias por tus comentarios Ma. Teresa, realmente esperamos que este esfuerzo ayude a cientos de familias. Qué gusto que tus hijos sean chicos tan bien portados, y que no te haya tocado sufrirle tanto.
Un abrazo!